Todo lo hago nuevo es la primera oración que a modo de diálogo entre la Palabra de Dios y la música.
Todo lo hago nuevo es una oración que pretende rescatar el optimismo de sentirnos amados por Dios y, por tanto, llamados a transmitirlo.
Descubrimos que, a pesar de que en ocasiones parece que la vida nos arrolla, Dios sigue estando de parte de cada una/o… y sigue dándonos motivos de esperanza, cada día.
Y nos invita a que nosotras/os también demos motivos de esperanza a quienes a nuestro alrededor están desespera(nz)ad@s.